Resumen
Es más importante protegerse del sol en el mar y la montaña, porque la radiación Ultravioleta es más intensa.
Es crucial fotoprotegerse para evitar el fotoenvejecimiento y otros problemas asociados a la exposición solar.
Durante el verano, muchas personas buscan disfrutar del aire libre y del sol en la montaña y la playa. Sin embargo, es crucial recordar los riesgos asociados a la exposición a los rayos ultravioleta (UV) del sol. En este artículo, exploraremos la importancia de la protección contra los rayos ultravioleta en ambos entornos y ofreceremos consejos para protegerse adecuadamente.
La montaña y los rayos ultravioleta: Aunque pueda parecer contradictorio, la exposición a los rayos UV en la montaña puede ser aún más intensa que en la playa. A medida que aumentamos en altitud, la atmósfera se vuelve más delgada y menos capaz de filtrar los rayos UV. Además, las superficies nevadas pueden reflejar hasta un 80% de la radiación UV, lo que aumenta aún más la exposición. Esto puede llevar a un mayor riesgo de quemaduras solares y daños en la piel, así como a un mayor riesgo de desarrollar enfermedades relacionadas con el sol, como el cáncer de piel.
Recomendaciones para protegerse en la montaña:
- Utilice protector solar de amplio espectro con un factor de protección solar (FPS) de al menos 30. Aplíquelo generosamente en todas las áreas expuestas de la piel y vuelva a aplicarlo cada dos horas, o más frecuentemente si está sudando o en contacto con el agua.
- Proteja sus ojos con gafas de sol que bloqueen el 100% de los rayos UVA y UVB.
- Use ropa de manga larga, pantalones largos y un sombrero de ala ancha para proteger su piel del sol. Opte por tejidos transpirables y de colores claros para mayor comodidad.
- Evite la exposición directa al sol durante las horas pico de radiación, generalmente entre las 10 a.m. y las 4 p.m.
- Busque sombra siempre que sea posible y considere la posibilidad de utilizar sombrillas o toldos para crear áreas de sombra adicionales.
La playa y los rayos ultravioleta: La playa es otro entorno donde la exposición a los rayos ultravioleta puede ser significativa. La combinación de agua, arena y el reflejo del sol puede aumentar la cantidad de radiación UV a la que estamos expuestos.
Recomendaciones para protegerse en la playa:
- Siga las mismas recomendaciones mencionadas anteriormente, como usar protector solar, gafas de sol y ropa protectora.
- Aplique protector solar antes de llegar a la playa para permitir que se absorba adecuadamente en la piel.
- Preste especial atención a áreas del cuerpo como la cara, los labios, las orejas, el cuello y los pies, que a menudo se descuidan pero también son propensas a quemaduras solares.
- No olvide protegerse incluso en días nublados, ya que los rayos UV pueden atravesar las nubes y causar daños en la piel.